Una idea de negocio se convierte en oportunidad de negocio cuando al proyecto se le pueden poner las características de: realista, añade valor y da beneficio. Sin embargo, detectar si una empresa o producto tiene valor o no, se puede hacer a través de un proceso de evaluación y toma de decisiones:
➤ Gestación de ideas: las fuentes de las ideas de negocio.
➤ Reconocimiento de oportunidades de negocio.
➤ Evaluación y valoración: Previabilidad del proyecto.
➤ Plan de empresa.
➤ Puesta en marcha.
Tanto si uno está empezando un negocio como si lleva varios años del otro lado de un mostrador, es fundamental identificar las nuevas oportunidades que el mercado puede ofrecernos para agregar valor a nuestra marca.
No se trata de convertirse en una especie de cazatalentos o algo parecido, aunque sí de aguzar el olfato emprendedor para saber dónde, cuándo, cómo y de qué forma podemos aprovechar una determina circunstancia o situación.
A veces, aunque cueste creerlo, las oportunidades de negocio pasan delante de nosotros y no las vemos. O quizá sí las vemos, pero no sabemos aprovecharlas.